Llevo días mirando los menús para mi boda, me muevo entre la originalidad de la cocina de autor, y termino viendo lo tradicional como lo mejor. Necesito que los salones tengan un aire moderno, pero sin perder ese toque de familiar que siempre imagine para el día de mi boda. Al fin me decido por dos salones en Toledo, uno en pleno casco histórico y otro a diez kilómetros. Mi fabuloso navegador puesto aprueba me va diciendo cual sería la ruta desde mi iglesia, al lugar del banquete, efectivamente prefiero el tradicional papel y lápiz jeje! Va ganando por goleada el sitio a diez kilómetros, al fin es mas cómodo ir hasta allí que ir descifrando un plano de calles. Los detalles son muy importantes y más en un día único cuando casi me dan resuelto el tema del baile de después del banquete, casi doy saltos, parece mentira cuando se trata con profesionales que fácil se da todo. Es un poco una locura, porque todo cuesta organizarlo un triunfo, desde la despedida de soltera (que no me atrevo ni a mencionar), hasta la forma de las mesas del banquete. Poco a poco vamos tachando de la boda, lo que en principio creímos que sería lo más difícil. La verdad es que encontrar estos salones fue un hallazgo jijeé, me planteo si el fotógrafo será obligatoriamente el del propio salón, porque me veo comprometida con mi amigo Carlos, el se empeña en hacernos el reportaje fotográfico y la verdad se lo agradecemos. ¡Opa! También nos dejan lo de nuestro fotógrafo, aunque hubiésemos podido contar con uno de los propios salones, llevan mucho tiempo encargándose con éxito de bodas y eventos en Toledo. Definitivamente este seré el salón de bodas, recomiendo que se sopese la calidad /precio y además los servicios que te ofrecen estos salones porque si es cierto que te puede arruinar el que a la hora del baile por ejemplo no tenga capacidad suficiente, o que no te dejen escoger los complementos como manteles y copas y sobre todo tu boda es única, el banquete es una parte muy importante después de la ceremonia la más importante. Además la gente recuerda los vestidos de los novios y sobre todo lo bien que se lo pasaron en el salón de bodas y lo bien que comieron en el banquete.
Una vez que decidimos que este salón era el más apropiado encargamos las invitaciones Sencillas y casi haciendo juego con el mantel... me encanta el malva que le voy hacer. Aunque algunas de ellas las mandamos por correo electrónico (hay que aprovechar las tecnología) nos permitimos mandarlas con el tarjetón escaneado. Las flores de la iglesia y las de mi ramo fueron escogidas por dos damitas de honor, que para mi cuentan mucho, y !!acertaron de pleno con el color!!
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