Hay planes de despedida que no suelen salir como una espera, y tardes que no son siempre de verano o primavera.
Es difícil acertar a veces con la organización de una buena despedida. Todo el mundo espera lo mejor y que nada fallé pero todos se olvidan de lo complicado que resulta para la persona organizadora hacerse cargo de todo. Y es que acertar con la fiesta de despedida no es “pan comido”, porque no a todo el mundo las gustan las mismas cosas, siempre hay alguien con alguna lesión que no puede hacer esto o lo otro, y resulta complejo cuadrar las actividades para todo el grupo. |